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Queso Camembert Horneado con Miel y Frutos Secos





Queso Camembert Horneado con Miel y Frutos Secos

Receta Fácil de Queso Camembert Horneado

Disfrute de una deliciosa combinación de queso Camembert tierno y fundido, miel dulce y frutos secos crujientes. Este plato no solo es un aperitivo perfecto para acompañar con vino, sino también una golosina maravillosa y fácil para los niños cuando se sirve con galletas o crackers. El queso sabroso se derrite maravillosamente, complementado por la dulzura de la miel y la textura satisfactoria de los frutos secos tostados.

Información de la receta

  • Categoría : Otros
  • Categoría de ingredientes : Huevos / Lácteos
  • Ocasión : Aperitivo / Tapas
  • Método de preparación : A la parrilla / Asado
  • Porciones : 2 porciones
  • Tiempo de preparación : En menos de 10 minutos
  • Dificultad : Para cualquiera

Ingredientes
  • 100 g de queso Camembert
  • 2 cucharadas de miel
  • 1 puñado de tus frutos secos favoritos (nueces, almendras, pecanas, etc.)

Instrucciones de preparación

Step 1

Primero, prepare su queso Camembert. Cortar el queso en trozos manejables permite que los ingredientes se mezclen bien y asegura una cocción uniforme. Prefiero cortarlo en 8 gajos, dejando la base intacta para que mantenga mejor su forma al manipularlo y servirlo. Si prefiere hornearlo entero, puede dejarlo tal cual.

Step 2

Rocíe la miel dulce uniformemente sobre el queso preparado. Puede ajustar la cantidad de miel a su gusto. El sirope de arce u otros edulcorantes líquidos también pueden ser alternativas deliciosas.

Step 3

A continuación, esparza generosamente sus frutos secos elegidos sobre el queso. Pique sus frutos secos favoritos, como nueces, almendras o pecanas, y espárzalos por encima. Esto añade un crujido maravilloso y un aroma a frutos secos al plato.

Step 4

Precaliente su horno o freidora de aire a 180°C (350°F). Coloque el queso preparado en el interior y hornee durante 6 a 10 minutos. El tiempo de cocción exacto puede variar según su electrodoméstico, el tamaño del queso y su grosor, así que vigílelo. Sabrá que está listo cuando el queso esté deliciosamente derretido por los bordes y los frutos secos estén ligeramente tostados y fragantes. Tenga cuidado de no hornearlo en exceso, ya que el queso puede volverse demasiado líquido. Se disfruta mejor caliente, ¡directamente del horno!



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