Yakgwa de Ginseng Horneados al Horno
Yakgwa al Horno con Aromático Ginseng
Hemos creado un Yakgwa especial combinando la dulzura del Yakgwa tradicional coreano con la fragante esencia del preciado ginseng. En lugar de freírlos en aceite, estos Yakgwa se hornean, ofreciendo un manjar más ligero y saludable sin la pesadez. El método de preparación es increíblemente sencillo, lo que facilita que cualquiera, incluso los principiantes, cree estas hermosas y tradicionales delicias. ¡Disfruta del delicioso Yakgwa de Ginseng en casa, con su sabor salado y su sutil y persistente aroma a ginseng!
Ingredientes para la Masa del Yakgwa- 1 raíz de ginseng fresco (aprox. 30-40g)
- 150g de harina de trigo común (aprox. 1.5 tazas)
- 50g de harina de arroz glutinoso (aprox. 0.5 taza)
- 50g de aceite de sésamo (aprox. 1/4 taza)
- 30g de soju o vino de arroz (aprox. 2 cucharadas)
- 2g de sal fina (aprox. 1/4 cucharadita)
- Una pizca de pimienta negra
- 60g de sirope de maíz (aprox. 1/4 taza)
Glaaceado para Yakgwa- 120g de miel (aprox. 1/2 taza)
- 180g de sirope de maíz (aprox. 3/4 taza)
Para Recubrir la Masa- 100ml de aceite de canola o vegetal (aprox. 1/2 taza)
- 120g de miel (aprox. 1/2 taza)
- 180g de sirope de maíz (aprox. 3/4 taza)
Para Recubrir la Masa- 100ml de aceite de canola o vegetal (aprox. 1/2 taza)
Instrucciones de preparación
Step 1
Primero, pesa y prepara todos los ingredientes necesarios para el Yakgwa. Lava bien el ginseng.
Step 2
Pela el ginseng preparado y pícalo muy finamente. Es importante preservar el aroma del ginseng.
Step 3
En un bol, combina la harina de trigo común y la harina de arroz glutinoso. Tamízalas juntas a través de un colador fino dos o tres veces. Esto evita grumos y da como resultado una masa mucho más suave.
Step 4
A la harina tamizada, añade el aceite de sésamo, la sal fina y la pimienta negra. Mezcla bien con un tenedor o raspador hasta que los ingredientes secos se combinen bien con el aceite, pareciendo arena gruesa.
Step 5
A la mezcla de harina, añade el ginseng finamente picado, el sirope de maíz y el soju (o vino de arroz). Comienza a amasar la masa con las manos hasta que todos los ingredientes se unan formando una bola cohesiva. Amasa suavemente para evitar que la masa quede dura.
Step 6
Saca la bola de masa y estírala uniformemente con un rodillo hasta un grosor de aproximadamente 2 cm (unas 0.8 pulgadas). Estirar a un grosor uniforme asegura que el Yakgwa se hornee de manera uniforme.
Step 7
Utiliza cortadores de galletas para crear formas decorativas con la masa estirada. Si no tienes cortadores, puedes usar un cuchillo para cortar la masa en piezas cuadradas limpias, de unos 3 cm de tamaño.
Step 8
Cubre una bandeja para hornear con papel de hornear y coloca las piezas de masa con formas. Pincha suavemente la superficie de cada Yakgwa con un palillo. Esto ayuda a evitar que se inflen demasiado durante el horneado y contribuye a una textura más crujiente.
Step 9
Sumerge brevemente cada pieza de masa con forma en aceite de canola (o vegetal) caliente, cubriendo ambos lados ligeramente. No las empapes demasiado tiempo; solo una inmersión rápida para cubrir la superficie antes de volver a colocarlas en la bandeja para hornear.
Step 10
Hornea en un horno precalentado a 120°C (250°F) durante 20 minutos. Para lograr un color más rico, aumenta la temperatura a 180°C (350°F) y hornea durante 5 minutos más. Luego, dale la vuelta al Yakgwa y hornea durante otros 5 minutos, para un total de 30 minutos hasta que estén dorados. Vigila de cerca para evitar que se quemen.
Step 11
Mientras se hornea el Yakgwa, prepara el glaseado. En una cacerola, combina la miel, el sirope de maíz y las raíces de ginseng finamente picadas (opcional, para añadir más aroma). Lleva a un hervor suave a fuego medio-bajo. Tan pronto como empiece a burbujear por los bordes, retira del fuego y deja que se enfríe ligeramente.
Step 12
Inmediatamente después de sacar el Yakgwa caliente recién horneado del horno, sumérgelos en el glaseado preparado. Déjalos absorber el sirope brevemente, luego retira el Yakgwa y transfiérelos a una fuente para que se enfríen. El objetivo es cubrir el Yakgwa con un brillo y dulzura, no hervirlos hasta obtener un sirope espeso, así que evita dejarlos en remojo demasiado tiempo.