Tostada Cremosa de Fresas y Crema: Receta Deliciosa con Fresas de Temporada
Prepara una deliciosa Tostada Cremosa de Fresas y Crema con fresas de temporada

¡Las fresas están deliciosas y a buen precio ahora mismo! Si te han sobrado algunas fresas frescas, no las dejes perder. Esta receta te muestra cómo transformarlas en una encantadora ‘Tostada Cremosa de Fresas y Crema’. Es una forma única y satisfactoria de disfrutar la temporada, perfecta para un desayuno especial, brunch o incluso un postre ligero. ¡Anímate a prepararla!
Ingredientes Principales- 1 rebanada de pan (elige el grosor que prefieras)
- 5-6 fresas frescas (ajusta la cantidad según el tamaño)
Crema y Dulzor- 200 ml de nata para montar (asegúrate de que esté bien fría para montar)
- 10 g de azúcar (ajusta a tu gusto)
- 200 ml de nata para montar (asegúrate de que esté bien fría para montar)
- 10 g de azúcar (ajusta a tu gusto)
Instrucciones de preparación
Step 1
Primero, prepara la rebanada de pan. Tóstala hasta que esté dorada y ligeramente crujiente, ya sea en una sartén o en el horno. Este paso añade un contraste de textura maravilloso con la cobertura cremosa. Asegúrate de tostarla a fuego medio para evitar que se queme.

Step 2
Lava suavemente las fresas bajo agua corriente, quítales el tallo verde y córtalas en rodajas de aproximadamente 0.5 cm de grosor. Intenta que las rodajas sean uniformes para que se vean bonitas sobre la tostada.

Step 3
En un bol, vierte la nata fría. Con una batidora eléctrica o unas varillas, empieza a montar la nata. Cuando empiece a espesar, añade gradualmente el azúcar en 2-3 partes, y sigue batiendo hasta que se formen picos firmes. Quieres que la nata esté firme y mantenga bien su forma, ¡casi como un merengue!

Step 4
Extiende generosamente la nata montada sobre el pan tostado. Coloca artísticamente las rodajas de fresa encima de la nata. ¡No seas tacaño con las fresas; una buena cantidad las hace aún más apetitosas!

Step 5
Disfruta tu deliciosa Tostada Cremosa de Fresas y Crema con un vaso de leche o una taza de café. A mi hija le encantó tanto que se comió ambas rebanadas antes de que pudiera sacar una foto decente. ¡Un final verdaderamente feliz! Pruébala y crea tu propio momento de alegría.


