Patatas Guisadas con Pimientos Coreanos (Ggari-Gochu) y Glaseado Brillante
Patatas Guisadas Dulces, Saladas y Ligeramente Picantes con Pimientos Coreanos
Las patatas guisadas son un plato casero muy común, pero a menudo resultan complicadas. Pueden deshacerse fácilmente, quedar crudas o tener un sabor desequilibrado. ¡Pero esta receta cambia todo eso! Al añadir pimientos coreanos (Ggari-Gochu), logramos un equilibrio perfecto entre dulzor, salinidad y un toque picante sutil. Hoy te guiaré paso a paso para que domines este delicioso plato, asegurando patatas tiernas y pimientos perfectamente infusionados. ¡Vamos a cocinar!
Ingredientes Principales- 2 patatas medianas
- 8 pimientos coreanos (Ggari-Gochu)
- 3 cebolletas (la parte verde y blanca)
- 1 cucharada de aceite vegetal
- 1/2 cucharada de ajo picado
- Una pizca de semillas de sésamo
Sazón- 3 cucharadas de salsa de soja
- 2 cucharadas de sirope de maíz (o sirope de arroz)
- 1 cucharada de mirin (vino de arroz japonés)
- Una pizca de pimienta negra
- 1 taza (200 ml) de caldo (de anchoas y algas, o vegetal) o agua
- 1 cucharada de aceite de sésamo
- 3 cucharadas de salsa de soja
- 2 cucharadas de sirope de maíz (o sirope de arroz)
- 1 cucharada de mirin (vino de arroz japonés)
- Una pizca de pimienta negra
- 1 taza (200 ml) de caldo (de anchoas y algas, o vegetal) o agua
- 1 cucharada de aceite de sésamo
Instrucciones de preparación
Step 1
Primero, para evitar que las patatas se deshagan durante la cocción, córtalas en trozos relativamente grandes, de unos 2.5-3 cm de cubo. Sumerge las patatas cortadas en agua fría durante unos 5 minutos para eliminar el exceso de almidón. Esto ayuda a que mantengan mejor su forma. Escúrrelas completamente.
Step 2
Prepara los pimientos coreanos quitando sus tallos y cortándolos por la mitad a lo largo. Corta las cebolletas en trozos de aproximadamente 2 cm. Mide 200 ml de caldo (o agua) y tenlo listo.
Step 3
Calienta una sartén profunda o una olla a fuego medio. Añade 1 cucharada de aceite vegetal y 1/2 cucharada de ajo picado. Sofríe hasta que esté fragante. Luego, añade las patatas cortadas y saltea durante unos 2-3 minutos hasta que los bordes se vean ligeramente translúcidos. Este salteado inicial ayuda a endurecer la superficie de la patata y prevenir que se rompa.
Step 4
Una vez que los bordes de las patatas se vuelvan translúcidos, vierte los 200 ml de caldo (o agua), las 3 cucharadas de salsa de soja y 1 cucharada de sirope de maíz. Remueve bien para combinar el condimento. Lleva la mezcla a ebullición, luego reduce el fuego a bajo, tapa la olla y deja que hierva a fuego lento durante unos 5-7 minutos, o hasta que las patatas estén tiernas.
Step 5
Después de 5-7 minutos, comprueba si las patatas están casi cocidas. Si todavía queda bastante líquido, destapa la olla y cocina a fuego medio durante 1-2 minutos más para reducir ligeramente la salsa. Cuando quede un poco de salsa, añade los pimientos coreanos partidos y las cebolletas picadas. Saltea suavemente durante otros 1-2 minutos, permitiendo que los sabores se mezclen.
Step 6
Finalmente, añade la cucharada restante de sirope de maíz y 1 cucharada de mirin. Remueve y cocina un momento hasta que la salsa cubra las patatas con un brillo. Justo antes de apagar el fuego, espolvorea una pizca de pimienta negra y rocía con 1 cucharada de aceite de sésamo para darle aroma. Añadir el sirope de maíz al final ayuda a crear un glaseado hermoso en las patatas.
Step 7
Si prefieres que tus pimientos coreanos tengan una textura más crujiente, puedes añadirlos durante el paso 4 mientras se reduce la salsa. Transfiere las patatas y pimientos guisados terminados a un plato para servir y espolvorea con semillas de sésamo. Este plato ofrece un delicioso sabor dulce, salado y ligeramente picante que es increíblemente adictivo. ¡Disfrútalo con un tazón de arroz caliente!