Mermelada de Remolacha Vibrante
Una Mermelada de Remolacha que Estimula el Apetito
Una deliciosa mermelada de remolacha que estimula tu apetito. Esta receta ofrece un giro al usar el microondas en lugar del horno para cocinar las remolachas, convirtiéndola en una experiencia casera más rápida y fácil. Su hermoso y vibrante color, junto con su perfil de sabor único, dulce y terroso, la convierten en una adición maravillosa para tu desayuno o como un aperitivo sofisticado. ¡Disfruta de esta golosina casera y saludable!
Ingredientes
- 4 remolachas rojas medianas (aprox. 500g)
- 1 1/2 tazas de azúcar granulada (aprox. 300g)
- 2 cucharadas de jengibre fresco, finamente picado
- 1 limón grande
Instrucciones de preparación
Step 1
Comienza lavando a fondo las 4 remolachas rojas para eliminar cualquier suciedad. Pela las remolachas y luego córtalas en cubos de aproximadamente 1.5 cm. Coloca las remolachas en cubos en un recipiente apto para microondas, cúbrelo con film transparente o una tapa, y cocina en el microondas durante unos 5 minutos. El tiempo de cocción puede variar según el tamaño de los trozos de remolacha y la potencia de tu microondas. Este paso ablanda las remolachas, facilitando su procesamiento.
Step 2
Una vez que las remolachas estén tiernas, retíralas con cuidado del microondas y deja que se enfríen un poco. Transfiere las remolachas ablandadas a un procesador de alimentos o licuadora. Procesa hasta obtener una consistencia de puré suave, asegurándote de que no queden grumos grandes. Si la mezcla está demasiado espesa, puedes agregar 1-2 cucharadas de agua para ayudar al proceso.
Step 3
Prepara el limón. Lava bien el limón. Ralla finamente la cáscara del limón, con cuidado de evitar la médula blanca amarga. Luego, exprime el jugo del limón y pica finamente la pulpa del limón. Pica finamente el jengibre fresco.
Step 4
Un consejo útil para extraer más jugo del limón: rueda suavemente el limón sobre tu tabla de cortar con la palma de tu mano antes de cortarlo por la mitad. Esto ayuda a romper las membranas internas, liberando más jugo. Exprime la mitad y usa la ralladura y la pulpa picada de la otra mitad.
Step 5
En una cacerola mediana, combina el puré de remolacha suave, 1 1/2 tazas de azúcar granulada, el jugo de limón recién exprimido, la ralladura de limón y el jengibre picado. Revuelve bien con una espátula para asegurar que todos los ingredientes estén distribuidos uniformemente. Coloca la cacerola a fuego medio-bajo y lleva a ebullición suave. Cocina, revolviendo con frecuencia para evitar que se pegue y se queme, hasta que la mermelada espese a tu gusto, lo que debería tomar entre 15 y 20 minutos. Se recomienda remover cada 5-10 minutos.
Step 6
Una vez que la mermelada haya alcanzado una consistencia ligeramente espesa (se espesará más al enfriarse), retírala del fuego. Con cuidado, vierte la mermelada caliente en frascos de vidrio limpios y esterilizados. Sella los frascos herméticamente con tapas. Una vez completamente enfriada, guarda la mermelada en el refrigerador. Debería conservarse bien durante aproximadamente un mes.
Step 7
Para una mayor vida útil, puedes optar por un método de enlatado al baño maría. Llena los frascos esterilizados con la mermelada caliente, dejando aproximadamente 1/2 pulgada de espacio libre en la parte superior. Limpia el borde del frasco y asegura la tapa firmemente. Coloca los frascos sellados en una olla grande con suficiente agua para cubrirlos al menos una pulgada. Lleva el agua a ebullición vigorosa y procesa durante 15 minutos. Retira con cuidado los frascos de la olla y deja que se enfríen completamente sobre una encimera. Se sellarán a medida que se enfríen, asegurando una vida útil más larga.
