Mermelada de Mandarina Dulce y Ácida
¡Transforma Mandarinas Poco Sabrosas en una Deliciosa Mermelada!
Recibí dos cajas de mandarinas como regalo, pero una de ellas tenía un sabor un tanto insípido, ni dulce ni ácido, lo que me dejó pensando qué hacer con ellas. ¡Así que decidí convertirlas en una deliciosa mermelada de mandarina dulce y ácida! Es una forma maravillosa de disfrutar el sabor natural de las mandarinas.
Ingredientes para la Mermelada de Mandarina
- Mandarinas Frescas: 1.3 kg
- Azúcar Blanca: 800g (La proporción de mandarinas a azúcar se puede ajustar de 1.5:1 a 1:1 según tu preferencia)
- Jugo de Limón: 1/2 taza de papel (aprox. 100ml)
Instrucciones de preparación
Step 1
Primero, lava bien las mandarinas y luego pélalas por completo. Si encuentras alguna semilla, retírala para obtener una mermelada más fina. Prepara las mandarinas peladas.
Step 2
Coloca las mandarinas peladas en una licuadora y licúa hasta que estén lo más suaves posible. Intenta lograr una consistencia donde apenas se noten trozos grandes.
Step 3
Ahora es el momento de añadir el azúcar a las mandarinas licuadas. Normalmente, se utiliza aproximadamente 2/3 del peso de las mandarinas en azúcar. Sin embargo, puedes ajustar esta proporción a 1:1 (partes iguales de mandarinas y azúcar) si prefieres una mermelada más dulce. Yo usé 2/3 para evitar que quedara excesivamente dulce.
Step 4
Para realzar la acidez y el sabor, añadiremos un poco de jugo de limón comercial. El jugo de limón potenciará las notas cítricas y aportará un aroma refrescante. Ajusta la cantidad según cuán ácidas sean las mandarinas de forma natural.
Step 5
Remueve bien la mezcla para asegurar que el azúcar se disuelva por completo en la pulpa de mandarina. Luego, transfiere cuidadosamente la mermelada a un frasco de vidrio esterilizado que haya sido hervido y completamente secado. Asegurarse de que el frasco esté seco es crucial para una correcta conservación.
Step 6
Deja el frasco cerrado a temperatura ambiente durante un día para permitir que el azúcar se disuelva completamente. Después, refrigéralo durante 3-4 días para que los sabores se mezclen. ¡Tu deliciosa mermelada de mandarina estará lista para disfrutar! Es mejor consumirla en un tiempo razonable. Puedes disfrutarla como un té caliente, un refrescante ‘ade’, o incluso mezclarla en aderezos para ensaladas para un sabor extra especial.
