Frituras Crujientes de Caqui Seco: ¡Un Delicioso Postre Coreano (K-Dessert) que Despertará tu Paladar!
Descubre cómo preparar unas deliciosas frituras de caqui seco, un postre coreano con un toque nostálgico y sabor único. Fáciles de hacer y perfectas para cualquier ocasión.
El caqui seco es naturalmente dulce y delicioso, pero al freírlo se transforma en una experiencia culinaria increíble. Estas frituras ofrecen una deliciosa combinación de texturas: crujientes por fuera y tiernas y dulces por dentro. Son el acompañamiento perfecto para una taza de té o un postre reconfortante que evoca sabores tradicionales.
Ingredientes Principales- 4 caquis secos
- Aceite vegetal para freír (cantidad generosa)
Masa Crujiente para Freír- 1 taza de harina para tempura (o mezcla para freír)
- Aproximadamente 3/4 taza de agua fría (ajustar la consistencia)
- 1 pizca de sal
- 0.5 cucharada de aceite vegetal (¡para una masa más crujiente!)
- 1 taza de harina para tempura (o mezcla para freír)
- Aproximadamente 3/4 taza de agua fría (ajustar la consistencia)
- 1 pizca de sal
- 0.5 cucharada de aceite vegetal (¡para una masa más crujiente!)
Instrucciones de preparación
Step 1
Primero, prepara tus 4 caquis secos. Asegúrate de que estén jugosos y con un sabor dulce pronunciado para obtener el mejor resultado.
Step 2
Retira cuidadosamente los tallos de los caquis secos. Luego, córtalos longitudinalmente por la mitad o en cuartos, y córtalos en trozos del tamaño de un bocado, de aproximadamente 2-3 cm de ancho. Cortarlos abiertos facilita que la masa se adhiera uniformemente.
Step 3
En un bol mediano, mezcla 1 taza de harina para tempura con 1 pizca de sal. Añade 0.5 cucharada de aceite vegetal a los ingredientes secos. Vierte gradualmente agua fría mientras mezclas suavemente con palillos o un batidor de mano, solo hasta que se combinen y no queden grumos secos de harina. Evita mezclar en exceso para no desarrollar el gluten, lo que podría hacer las frituras duras. Algunos pequeños grumos son aceptables.
Step 4
La consistencia ideal de la masa debe ser ligeramente líquida, similar a la de los panqueques, para que gotee fácilmente de una cuchara. Si la masa está muy espesa, el rebozado será pesado; si está muy líquida, podría no adherirse bien. Ajusta con un poquito más de agua si es necesario.
Step 5
Sumerge suavemente los trozos de caqui seco preparados en la masa, asegurándote de que cada trozo quede completamente cubierto. Usa palillos o un tenedor para girar suavemente los trozos de caqui, asegurando que la masa los cubra de manera uniforme. Si la masa parece demasiado espesa, añade un chorrito extra de agua fría.
Step 6
Calienta una cantidad generosa de aceite vegetal en una olla o sartén profunda a fuego medio-alto, a unos 170-180°C (340-355°F). Prueba la temperatura del aceite dejando caer una pequeña cantidad de masa; debe chisporrotear y flotar inmediatamente. Con cuidado, coloca los trozos de caqui rebozados en el aceite caliente, asegurándote de no llenar demasiado la sartén. Fríe durante unos 2-3 minutos, o hasta que estén dorados y crujientes. Reduce el fuego ligeramente si se doran demasiado rápido.
Step 7
Una vez doradas y crujientes, retira las frituras de caqui del aceite con una espumadera y colócalas sobre un plato forrado con papel de cocina para que escurran el exceso de aceite. Disfrútalas mientras están calientes para obtener la mejor textura crujiente y tierna. Si lo deseas, puedes espolvorear un poco de azúcar glas por encima para un toque extra de dulzura.
