¡Crujientes por Fuera, Tiernos por Dentro! Receta Súper Sencilla de Buñuelos de Calabacín
Buñuelos de Calabacín Fáciles y Deliciosos para Todos
¡No dejes que esos calabacines sobrantes se desperdicien! Conviértelos en deliciosos buñuelos de calabacín que quedan maravillosamente crujientes por fuera y tiernos por dentro. Esta receta súper sencilla no requiere ingredientes especiales y resulta en un acompañamiento fantástico o un aperitivo perfecto para disfrutar con bebidas.
Ingredientes Clave- 1/2 calabacín mediano
- 1/2 cucharadita de sal
- Cantidad generosa de aceite de cocina (para freír)
- 1 taza de harina de trigo (o mezcla para panqueques)
- 2 huevos
Instrucciones de preparación
Step 1
Primero, lava bien el calabacín bajo agua corriente. Retira los extremos y córtalo en rodajas finas y uniformes de aproximadamente 0.5 cm de grosor. Coloca el calabacín en rodajas en un bol y espolvorea con 1/2 cucharadita de sal. Déjalo reposar durante 10 minutos para que suelte el exceso de humedad. Este paso es crucial para lograr unos buñuelos firmes que no queden blandos.
Step 2
Mientras el calabacín se sala, rompe los 2 huevos en otro bol y bátelos bien. Batir los huevos a fondo hasta que estén suaves ayudará a crear unos buñuelos más tiernos.
Step 3
Después de 10 minutos, revisa la humedad del calabacín. Transfiere las rodajas de calabacín saladas a una toalla de papel y sécalas, retirando la mayor cantidad de agua posible. Asegurarte de que el calabacín esté seco evitará que los buñuelos queden empapados.
Step 4
Ahora es el momento de rebozar el calabacín. Coloca aproximadamente 1 taza de harina en una bolsa de plástico limpia. Añade las rodajas de calabacín secas a la bolsa y agítala suavemente para asegurar un recubrimiento uniforme y fino de harina en cada rodaja. Evita una capa gruesa; un recubrimiento ligero es lo mejor.
Step 5
Sacude suavemente el exceso de harina de las rodajas de calabacín rebozadas. A continuación, sumerge cada rodaja de calabacín enharinada en la mezcla de huevo batido, asegurándote de que quede bien cubierta por ambos lados. Puedes presionar ligeramente el calabacín en el huevo batido para que se adhiera mejor.
Step 6
Calienta una cantidad generosa de aceite de cocina en una sartén a fuego medio. Coloca con cuidado las rodajas de calabacín cubiertas de huevo en el aceite caliente, disponiéndolas en una sola capa. Fríe durante unos minutos por cada lado hasta que estén doradas y crujientes. Deben quedar doradas y bien cocidas. ¡Sírvelas inmediatamente mientras están calientes para obtener la mejor textura!
