Crème Brûlée Irresistible: El Postre Francés Clásico
Auténtica Crème Brûlée Francesa: Disfruta de un Postre Elegante en Casa
Esta receta te permite crear un postre magnífico con solo unos pocos ingredientes básicos. Experimenta la armonía perfecta de una crema pastelera suave, delicadas notas de vainilla y una cobertura crujiente de azúcar caramelizada.
Ingredientes- 500ml de Nata Fresca para montar (con al menos 35% de grasa recomendada)
- 6 Yemas de Huevo Grandes
- 70g de Azúcar Granulada (para la crema)
- 2 Pizcas de Sal
Instrucciones de preparación
Step 1
En un bol, separa las 6 yemas de huevo grandes. Añade los 70g de azúcar granulada a las yemas. Bate suavemente con un tenedor o unas varillas hasta que estén bien combinadas y el azúcar se haya disuelto en las yemas. Evita batir en exceso; el objetivo es incorporar el azúcar suavemente.
Step 2
Vierte los 500ml de nata fresca para montar en una cacerola. Usar nata fresca y de buena calidad realzará la riqueza de tu crème brûlée.
Step 3
Añade 2 pizcas de sal a la nata. La sal es crucial para equilibrar la dulzura y realzar el perfil de sabor general del postre.
Step 4
Coloca la cacerola a fuego medio-bajo. Remueve constantemente con una cuchara de madera o espátula para evitar que la nata se queme en el fondo. Calienta suavemente la nata, removiendo continuamente, hasta que esté tibia y suave, pero sin que hierva.
Step 5
Calienta la nata justo hasta que humee y comiencen a formarse unas pocas burbujas en los bordes. El objetivo es una temperatura de aproximadamente 80-85°C (175-185°F). Retira del fuego inmediatamente para evitar que hierva, lo que podría afectar la textura.
Step 6
Ahora, templa las yemas de huevo. Mientras bates constantemente la mezcla de yemas y azúcar, vierte lentamente aproximadamente la mitad de la nata tibia en las yemas. Esta adición gradual evita que las yemas se cocinen y cuajen. Una vez incorporada, vierte esta mezcla de yemas templadas de nuevo en la cacerola con la nata restante.
Step 7
Remueve la mezcla suavemente a fuego bajo durante uno o dos minutos hasta que espese ligeramente. No dejes que hierva. Luego, cuela la mezcla de crema pastelera a través de un colador de malla fina en un bol o jarra limpios. Este paso elimina cualquier trozo de huevo cocido o impurezas, asegurando una textura sedosa y suave.
Step 8
Vierte la mezcla de crema colada en rabaneras individuales aptas para horno. Llénalas aproximadamente hasta dos tercios de su capacidad. Luego, cubre la parte superior de cada rabanera firmemente con papel de aluminio. Esto evita que se forme una piel y que entre exceso de humedad durante el horneado.
Step 9
Coloca las rabaneras cubiertas con papel de aluminio en una bandeja de horno más grande. Vierte cuidadosamente agua caliente en la bandeja grande, creando un baño maría que llegue aproximadamente hasta la mitad de los lados de las rabaneras. Este baño maría asegura una cocción suave y uniforme. Hornea en un horno precalentado a 170°C (340°F) durante aproximadamente 30 minutos, o hasta que los bordes estén firmes pero el centro todavía tiemble ligeramente.
Step 10
Retira con cuidado las rabaneras del baño maría. Deja que se enfríen a temperatura ambiente durante unos 15 minutos, luego retira el papel de aluminio. Cubre con film transparente y refrigera durante al menos 3-4 horas, o preferiblemente toda la noche, hasta que estén completamente frías y cuajadas.
Step 11
Justo antes de servir, espolvorea una capa fina y uniforme de azúcar granulada (o azúcar especial para brûlée) sobre la superficie de cada crema fría. Asegúrate de que toda la superficie esté cubierta para obtener una costra de caramelo uniforme.
Step 12
Usando un soplete de cocina (de gas), carameliza cuidadosamente el azúcar hasta que se derrita y se convierta en una hermosa costra crujiente de color ámbar. Mueve el soplete continuamente para evitar quemar un solo punto. El sonido del azúcar al romperse al enfriarse es la señal de una crème brûlée perfecta. ¡Disfruta inmediatamente!
