Últimamente ha estado lloviendo sin parar, haciendo que el clima se sienta un poco fresco, como un rito de paso para la primavera. Después de la lluvia primaveral, pronto veremos brotes y capullos de flores emergiendo con avidez, llenos de humedad y la energía de la primavera. Se ha convertido en un hábito para mí anhelar buñuelos en los días lluviosos de primavera. Algunos dicen que el rico y sabroso aroma de los buñuelos recién fritos perdura más y huele más intenso en los días grises porque el aire es más denso, estimulando nuestro sentido del olfato y el apetito. Compré un paquete de ostras, picé las verduras de primavera minari y dallae que tenía en la nevera, añadí un poco de repollo napa rallado y preparé estos deliciosos buñuelos de ostra. Los acompañé con un vaso de makgeolli para la combinación perfecta. Serví los sabrosos buñuelos de ostra, serví un vaso de makgeolli y los tomé para cenar, reemplazando una comida normal. Un buñuelo, lleno de la esencia de las verduras de primavera, frito hasta quedar crujiente y dorado, acompañado de makgeolli: es suficiente para embriagarse con los sabores de la primavera y la suave lluvia. La primavera realmente está en camino~ ^^