Chips de Patata Caseros y Crujientes
Chips de Patata Fáciles para Hacer en Casa
Aquí tienes una sencilla receta para hacer chips de patata caseras. Las patatas cortadas finamente se sumergen en salmuera para aumentar su crocancia y luego se fríen en sartén hasta que estén doradas. ¡Disfruta de este delicioso tentempié, perfecto para noches de cine o como acompañamiento para tu cerveza!
Ingredientes Principales- 1 patata mediana
Salmuera y Fritura- 500ml de agua
- 30g de sal (aprox. 2 cucharadas)
- 20g de aceite de cocina (aprox. 1.5 cucharadas)
- 500ml de agua
- 30g de sal (aprox. 2 cucharadas)
- 20g de aceite de cocina (aprox. 1.5 cucharadas)
Instrucciones de preparación
Step 1
Empieza con una patata fresca. Primero, enjuaga la patata bajo agua fría una o dos veces para eliminar suavemente cualquier suciedad o residuo. Este paso se realiza antes de pelarla para asegurar que la superficie de la patata esté limpia.
Step 2
Pela la patata completamente. Usa un pelador o un cuchillo para quitar la piel finamente. Después de pelarla, vuelve a colocar la patata en agua fría durante unos 10 minutos para eliminar el exceso de almidón. Este proceso de remojo ayuda a que las patatas fritas queden más crujientes.
Step 3
Corta la patata en rodajas finas. Intenta que tengan un grosor de aproximadamente 1-2 mm; cuanto más finas sean las rodajas, más crujientes serán tus chips. Una mandolina o un pelador de verduras pueden facilitar este paso. Prepara la salmuera disolviendo 30g de sal en 500ml de agua fría. Sumerge las patatas cortadas en esta salmuera durante 15 minutos para extraer el almidón y sazonarlas. Después, escúrrelas completamente en un colador y sécalas por completo con papel de cocina. Eliminar la mayor cantidad de humedad posible evita salpicaduras de aceite y contribuye a una mayor crocancia.
Step 4
Calienta el aceite de cocina en una sartén a fuego medio-bajo. Coloca las rodajas de patata secas en una sola capa, asegurándote de que no se superpongan. Fríelas en la sartén hasta que estén doradas y crujientes por ambos lados. Ajusta el tiempo de cocción según el grosor de tus rodajas de patata. Ten cuidado de que no se quemen. Una vez que alcancen un hermoso color marrón dorado, ¡tus deliciosos chips de patata caseros estarán listos! Son deliciosos servidos calientes, o puedes dejarlos enfriar completamente para una textura aún más crujiente.